domingo, 26 de mayo de 2013

Poesía para internos:



Dos puntos

-Estoy cansado, agotado, muerto en vida… sólo ahí.
Estoy gastado, magullado, herido de muerte, débil, muy débil.
La mezquindad me sonríe y me hace cariños,
Siempre está allí escondida entre las uñas y la carne,
Entre las pestañas, en la comisura de los labios,
En ese dolor que me punza y me punza,
En ese resquemor que siempre atesoro
Como si de algo sirviera, y quizá sirva…
La mezquindad con mezquindad se cura. ¿No?..
Hace varios días que me duele el pecho,
Entre mis costillas se acuna un odio profundo que ya no tiene rostro,
Ya no tiene nombre, ya no tiene un porqué.
Ni siquiera estoy seguro de que sea odio,
Puede ser cáncer, no sé;
Lo que sé es que no me gusta,
No me gusto,
No  me gustan…
¿Qué me pasa doctor?

-No lo sé… no sé qué nos pasa señor.

Andrés B. Grenouille